En nuestra infancia conocimos a un hombre que solía voltear novillos tomándolos de las guampas. El pesado animal venía a la carrera, levantando un polvaredal que lo tapaba. El hombre, mirando fijamente con sus ojos verdes lo esperaba alerta. Cuando el animal estaba por llegar a él se lanzaba hacia su cabeza, tomaba un cuerno en cada mano y con un movimiento ágil lo derribaba. Después venían los peones, rápidamente se tiraban encima y lo inmovilizaban.
El mismo hombre que tan fácilmente efectuaba esas hazañas, solía irse de su hogar por tras de alguna mujer, dejando a su familia abandonada. Regresaba desencantado, agrio, sin entusiasmo ni dinero, varios meses después, reclamando encima que su esposa y sus hijos lo consolaran.
Estas costumbres bárbaras se conservan aún hoy en algunos lugares de nuestra campaña. Cuán deseable sería que estos hombres, así como se animan a enfrentar fieras bestias con riego de su vida, se atreviesen también a enfrentar al egoísmo, esa bestia nefanda que todos llevamos dentro. Y que produce calamidades peores que las magulladuras de un toro. Pues lastiman para siempre el alma de quienes deberíamos haber amado y no lo hicimos.
Blog personal de Julio Carreras. Argentino. Escritor, pintor, dibujante, periodista, músico; nació en 1949 en Guasayán, Santiago del Estero.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
El futuro de la Humanidad
La Humanidad es un Cuerpo. Fragmentos de él -las Personas- son perceptibles con los sentidos. Su masa mayor, constituida por diversos géne...
-
Por: Julio Carreras (h) A esta altura de nuestra evolución, está demostrado ya que la democracia es el mejor sistema imaginado por la humani...
-
UTURUNCOS Julio Carreras La toma del centro policial de Frías, Santiago del Estero, fue la primera acción guerrillera del siglo XX en la Ar...
-
Portada del diario español El País, edición especial del 11 de marzo de 2004. Sobre los atentados del 11 de marzo en España. A requerimie...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario